¿Qué es la Norma Granada?

El arbolado es uno de los elementos clave de la infraestructura verde a diferentes escalas, urbana, regional e internacional, tanto por los innumerables beneficios que proporciona, como por ser un elemento configurador y estructurador de espacios en diferentes contextos, que incluyen tanto a las urbes como a los entornos más rurales y naturales.

El arbolado cobra cada día más importancia ya que es fácilmente identificable por la sociedad, es duradero y genera un gran elenco de mejoras medioambientales, de salud, económicas, da carácter al entorno, etc... Todos somos conscientes de estos beneficios que ya se están calculando en términos económicos; ello permite esgrimir argumentos sobre la necesidad de tener árboles, especialmente en nuestras ciudades, y lo rentable que puede llegar a ser desde una óptica de salud pública, medioambiente, social, etc...

La Norma Granada es un método de valoración económica de árboles ornamentales a partir de la máxima objetivación de los elementos y factores tomados del mercado o de la realidad, proyección en el tiempo de los datos y funciones, tamaño, precio obtenidos, etc.

Se distingue entre árboles sustituibles (aquellos que se pueden comprar y replantar) y no sustituibles (aquellos que no son posibles de conseguir en el mercado de viveros).

Aprobada por muchos Ayuntamientos es la que se aplica para conseguir el  valorar ornamental  por los daños que se producen  en el arbolado urbano de la ciudad.

En Madrid es aplicable como  el Método de Valoración del Arbolado Ornamental Norma Granada. Adoptadas por el Acuerdo del Consejo del Ayuntamiento de Madrid de 7 de noviembre de 1991.

¿Para qué sirve?

• Expropiación, afección a arbolado de terceros por actividad de planeamiento de la Administración.
• Estimación de repercusión de catástrofes, incendios, inundaciones.
• Daños a bienes municipales (patrimonio arbóreo), concepto de valoración de daños por obras en vía pública, redes de servicio, accidentes de tráfico y vandalismo. Fianzas e indemnizaciones por infracciones.
• Valoraciones patrimoniales.
• Catastro, inventario o catálogo.
• Evaluación de rentabilidad de transplantes.
• Seguros.
• Regulación mediante Ordenanzas y Normas Urbanísticas.
• Valoración de impacto ambiental, evaluación económica.

Aplicación de la Norma Granada

Lo primero que hay que resaltar es que se trata de un método para valorar árboles y arbustos de tipo ornamental, no es aplicable en casos de plantaciones forestales o frutales, siendo un árbol ornamental, todo aquel que se planta con un fin decorativo, especialmente por sus características estéticas, bien sea por las flores, tipo de follaje, tallos o aromas que expelen.

Y si están dentro del ámbito urbano posiblemente constituyen parte de un diseño paisajístico, este tipo de árboles no producen rentas como es el caso de los árboles frutales o los de uso forestal.

Por tanto, hay que considerar aspectos como la estética, el simbolismo, uso paisajístico o el bienestar que proporcionan en el momento de ser valorados.

Tasación económica de arboles en España

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